La integración de los cinco ejercicios

Vamos a presentar la integración de los cinco ejercicios tal y como lo presenta Rudolf Steiner en varios de sus escritos:

Ejercicios del alma (GA 267)

Traducción propia:

En el sexto mes se deberá intentar llegar a una alternancia sistemática de los cinco ejercicios tratando de proponérselo una y otra vez. De esta manera se irá generando un bonito equilibrio del alma.

Particularmente, se puede notar que cualquier insatisfacción existente con la apariencia y la naturaleza del mundo desaparece por completo. Un estado de reconciliación con todas las vivencias se instala en el alma, que no es, en ningún momento, indiferencia, sino, por el contrario, una capacidad para trabajar y avanzar en el mundo.

Se abre así una tranquila comprensión de las cosas, ante las que el alma se encontraba cerrada anteriormente.

Incluso el porte y la manera de andar pueden cambiar tras este ejercicio, hasta notarse que se modifica la letra a la hora de escribir. Será entonces que uno se pueda decir «Este es el primer peldaño de ascenso en la subida hacia arriba»

Una vez más, hay que destacar dos cosas:

Primero, que los seis ejercicios pueden llegar a mitigar los efectos perjudiciales de otras prácticas ocultas, de manera que solo quedará lo propicio.

Y segundo, que por si mismos aseguran el éxito positivo del trabajo de meditación y concentración

El mero, aunque concienzudo cumplimiento de la moral común, no es suficiente para el esoterista, pues esta moral puede ser muy egoísta, cuando uno se dice a si mismo «Quiero ser bueno para que ser percibido como bueno.»

La persona espiritual no hace el bien para ser percibido como virtuoso, sino porque percibe que el Bien, por si mismo hace avanzar la evolución humana, mientras que el mal, la estulticia y lo feo ponen obstáculos a dicha evolución.

De la ciencia Oculta, un bosquejo (GA 56)

Traducción propia:

De esta forma se han mencionado las cinco propiedades anímicas que debe adquirir el alumno esotérico:

Dominio del pensamiento

Dominio de los impulso de la voluntad

Ecuanimidad frente al dolor y al placer

Positividad en el juicio frente al mundo

Imparcialidad ante cada experiencia

Todo aquel que haya ido adquiriendo de forma consecutiva estas cinco capacidades del alma, tendrá la necesidad de llevarlas hasta afinarlas de una forma armónica. Se deberá trabajar de dos en dos; de tres en tres hasta alcanzar dicha armonía-

En (Cómo se alcanza el conocimiento de los mundos superiores)

Traducción propia:

La sexta facultad es la conquista de un determinado equilibrio vital (ecuanimidad). Aquel que busca el desarrollo espiritual aspira a mantener un estado de ánimo constante y uniforme ya se encuentre con algo feliz o doloroso. (…) La desgracia, el peligro le encuentran igual de dispuesto que cuando aparece la suerte.

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