Meditación del Yo en la Ciencia Oculta
Presentamos una meditación para acercarse al Yo que aparece en la Ciencia Oculta de Rudolf Steiner en un trabajo elaborado por el Dr. Christoph Hueck en su libro Erkenntnis und Meditation (Conocimiento y meditación).

Meditación del Yo paso a paso
Como siempre se comienza entrando a través del portal de la Veneración y de la Devoción que proviene del asombro. Posteriormente se trata de ir recorriendo los siguientes pasos de una forma meditativa:
Los textos en cursiva pertenecen a la Ciencia Oculta GA 13 (en la edición de la imagen el texto mencionado se encuentra en la página 61)
Primer paso; Observación
Podemos observar un hecho sencillo pero de gran alcance: en todo el vasto dominio del lenguaje existe un solo nombre que se distingue esencialmente de todos los demás: el término „yo“.
Segundo paso: Activación del pensar
En este segundo paso tomamos conciencia de que:
Cualquier otro nombre puede aplicarlo cualquiera a cualquier objeto; en cambio, el „yo“, como designación para un ser, tiene sentido solamente cuando un ser se lo aplica a sí mismo.
Tercer paso: Experimentar
Podemos ahora recurrir a la experiencia:
El término „yo“ nunca podrá llegar desde fuera al oído de un ser humano como su designación; sólo el individuo en cuestión puede emplearlo para designarse.
Cuarto paso: Autodeclaración como un hecho
Las ideas anteriores me permiten declarar
„Soy un yo sólo para mí, para cualquier otra persona soy un tú, y todas las otras personas son
un tú para mí .“
Quinto paso: Reconocimiento Dignificación
Llegamos en este paso a una profunda verdad que se puede hacer profunda experiencia
Este hecho es la expresión externa de una verdad profunda: la verdadera esencia del „yo“ es
independiente de todo lo exterior; por esta razón, ningún ser exterior puede llamarlo por éste,
su nombre.
Sexto paso: Unirse a las corrientes espirituales
En este paso nos unimos meditativamente con todas las corrientes espirituales que han conservado su conexión con la sabiduría suprasensible:
De ahí que en los sistemas religiosos que, con plena conciencia, han conservado su conexión con la sabiduría suprasensible, se considere la voz „yo“ como el „nombre inefable de Dios“, expresión que alude acertadamente a la situación que acabamos de indicar: se trata de la parte del alma humana a la que nada exterior tiene acceso.
Séptimo paso: Creación del Santuario interno
Creamos el Santuario interno
He aquí el „santuario secreto“ del alma, y sólo podrá penetrar en él un ser que sea esencialmente idéntico a ella
Y colocamos en nuestro corazón estas dos frases:
„El Dios que mora en el hombre, empieza a hablar cuando el alma se reconoce como yo“
El Hombre puede encontrar en si mismo lo divino porque procede de lo Divino.
Cerramos con agradecimiento a este camino de conciencia y al Hecho de nuestro Yo Divino.